Tanto si tiene várices como si pertenece a un grupo de riesgo, le convendrá habituarse a estas reglas de oro.
• Hacer un poco de ejercicio diario, a la mañana después de levantarse realizar una pequeña rutina de estiramiento y calentamiento por 10 minutos. Comenzar desde la cabeza e ir bajando hasta los pies.
• Descansar un rato al final de la jornada con los pies en alto, vendrá muy bien dormir con una almohada debajo del colchón, a la altura de los pies o alzando unos centímetros la cama. El efecto de la ¡¡ fuerza de gravedad es decisivo en la lucha contra las várices. Si colocamos las piernas a un nivel más elevado que el corazón favorecemos el retorno a éste de la sangre venosa.
• Durante el día a provechar cualquier momento para colocar las piernas elevadas y hacer movimientos de flexión y extensión de los pies.
• Aplicaciones de agua fría, chorro de agua fría subiendo por los pies y dejando que caiga agua por encima de las rodillas.
• Respiraciones profundas: El efecto aspirante de las inspiraciones profundas favorece también la circulación. Cualquier ejercicio físico que provoque una activación de la respiración, será beneficioso para mantener a raya las várices.
• Evitar la obesidad y el estreñimiento crónico, para lograrlo llevar una dieta equilibrada rica en fibras, verduras frescas, poca carne.
• No acerque sus piernas a fuentes de calor, evite los espacios muy calefacciona-dos, en su casa trate de tener siempre las habitaciones con un poco de ventilación, aun en invierno.
• No use ligas ni ningún tipo de medias que le opriman las piernas, evite utilizar durante varias horas tacos altos y en especial del tipo aguja.
• Evite permanecer de pie y sin caminar durante períodos prolongados.
• Hacer un poco de ejercicio diario, a la mañana después de levantarse realizar una pequeña rutina de estiramiento y calentamiento por 10 minutos. Comenzar desde la cabeza e ir bajando hasta los pies.
• Descansar un rato al final de la jornada con los pies en alto, vendrá muy bien dormir con una almohada debajo del colchón, a la altura de los pies o alzando unos centímetros la cama. El efecto de la ¡¡ fuerza de gravedad es decisivo en la lucha contra las várices. Si colocamos las piernas a un nivel más elevado que el corazón favorecemos el retorno a éste de la sangre venosa.
• Durante el día a provechar cualquier momento para colocar las piernas elevadas y hacer movimientos de flexión y extensión de los pies.
• Aplicaciones de agua fría, chorro de agua fría subiendo por los pies y dejando que caiga agua por encima de las rodillas.
• Respiraciones profundas: El efecto aspirante de las inspiraciones profundas favorece también la circulación. Cualquier ejercicio físico que provoque una activación de la respiración, será beneficioso para mantener a raya las várices.
• Evitar la obesidad y el estreñimiento crónico, para lograrlo llevar una dieta equilibrada rica en fibras, verduras frescas, poca carne.
• No acerque sus piernas a fuentes de calor, evite los espacios muy calefacciona-dos, en su casa trate de tener siempre las habitaciones con un poco de ventilación, aun en invierno.
• No use ligas ni ningún tipo de medias que le opriman las piernas, evite utilizar durante varias horas tacos altos y en especial del tipo aguja.
• Evite permanecer de pie y sin caminar durante períodos prolongados.