Tiene mal carácter, va del humor a la depresión sin escalas. Estas son las descripciones que se suele hacer de aquellas personas que pasan de la risa al llanto sin poder explicarlo. La psiquiatría denomina a este mal trastorno bipolar. Y ésta es una enfermedad que puede originar graves consecuencias al enfermo y a la familia si no se detecta a tiempo.
Para muchas personas resulta común pasar de la mayor excitación al peor de los estados de angustia, pero son pocos los que saben que este estado de ánimo dolorosamen-te cambiante es conocido como trastorno bipolar y que puede traer serios problemas. Esta enfermedad, llamada también personalidad maníaco-depresiva, se caracteriza por un ánimo de naturaleza inestable y en ocasiones extrema, que alterna períodos de excesiva euforia con otros de profundatristeza y desesperación.
Se estima que un uno por ciento de la población argentina padece esta afección crónica, pero que sólo un tercio de los enfermos recibe el tratamiento adecuado, en especial porque se trata de una patología difícil de detectar o mal diagnosticada. Todo ello hace que ésta sea una de las enfermedades psiquiátricas menos tratadas. Durante su fase maníaca, se asiste a una exaltación del estado de ánimo del sujeto, acompañada de irritabilidad, falta de sueño, flujo rápido de pensamientos, verborrea; además de una serie de acciones contraproducentes, como el impulso excesivo por comprar o el libertinaje sexual, que traen significativos efectos negativos sobre la vida social o el trabajo.
Por otra parte, muchos de los afectados experimentan síntomas psicóticos, como sentimientos de omnipotencia, llegando a creerse en ocasiones dioses o personas celebres. Generalmente, el episodio maníaco aparece de modo repentino y con frecuencia sucede luego de haber experimentado un período de depresión profunda. La irritabilidad y el insomnio son el primer cambio visible y son elementos clave para detectar la enfermedad.
En el polo opuesto, los Individuos bipolares sufren profundos cuadros depresivos, caracterizados por: tristeza, cansancio, pérdioa de energía, exceso de sueño, ganancia o pérdida de peso, disminución de la capacidad para concentrarse o tomar decisiones, sentimientos de culpa, baja autoestima, desesperanza y oensamientos o intentos de suicido.
La Investigación pudo demostrar ni explicar las causas que provocan este trastorno, pero sí se comprobó que existe una combinación de factores biológicos, genéticos y ambientales que parecen desencadenar esta compleja enfermedad. Aunque no todos los casos tienen una historia familiar determinante, la genética juega un oapel importante, puesto que os padres bipolares pueden transmitir una vulnerabilidad y jna predisposición de entre un 10 y 15 por ciento a sus hijos, ambién es frecuente que en las familias de los pacientes naya miembros con otros problemas psiquiátricos, como esquizofrenia y depresiones -ayores; afecciones conside radas por muchos expertos como variantes de un mismo espectro.
Estos incluyen, por ejemplo, problemas en el nacimiento, el uso de ciertas drogas alucinógenas o la presencia de infecciones víricas en la madre durante la gestación.
Para muchas personas resulta común pasar de la mayor excitación al peor de los estados de angustia, pero son pocos los que saben que este estado de ánimo dolorosamen-te cambiante es conocido como trastorno bipolar y que puede traer serios problemas. Esta enfermedad, llamada también personalidad maníaco-depresiva, se caracteriza por un ánimo de naturaleza inestable y en ocasiones extrema, que alterna períodos de excesiva euforia con otros de profundatristeza y desesperación.
Se estima que un uno por ciento de la población argentina padece esta afección crónica, pero que sólo un tercio de los enfermos recibe el tratamiento adecuado, en especial porque se trata de una patología difícil de detectar o mal diagnosticada. Todo ello hace que ésta sea una de las enfermedades psiquiátricas menos tratadas. Durante su fase maníaca, se asiste a una exaltación del estado de ánimo del sujeto, acompañada de irritabilidad, falta de sueño, flujo rápido de pensamientos, verborrea; además de una serie de acciones contraproducentes, como el impulso excesivo por comprar o el libertinaje sexual, que traen significativos efectos negativos sobre la vida social o el trabajo.
Por otra parte, muchos de los afectados experimentan síntomas psicóticos, como sentimientos de omnipotencia, llegando a creerse en ocasiones dioses o personas celebres. Generalmente, el episodio maníaco aparece de modo repentino y con frecuencia sucede luego de haber experimentado un período de depresión profunda. La irritabilidad y el insomnio son el primer cambio visible y son elementos clave para detectar la enfermedad.
En el polo opuesto, los Individuos bipolares sufren profundos cuadros depresivos, caracterizados por: tristeza, cansancio, pérdioa de energía, exceso de sueño, ganancia o pérdida de peso, disminución de la capacidad para concentrarse o tomar decisiones, sentimientos de culpa, baja autoestima, desesperanza y oensamientos o intentos de suicido.
La Investigación pudo demostrar ni explicar las causas que provocan este trastorno, pero sí se comprobó que existe una combinación de factores biológicos, genéticos y ambientales que parecen desencadenar esta compleja enfermedad. Aunque no todos los casos tienen una historia familiar determinante, la genética juega un oapel importante, puesto que os padres bipolares pueden transmitir una vulnerabilidad y jna predisposición de entre un 10 y 15 por ciento a sus hijos, ambién es frecuente que en las familias de los pacientes naya miembros con otros problemas psiquiátricos, como esquizofrenia y depresiones -ayores; afecciones conside radas por muchos expertos como variantes de un mismo espectro.
Estos incluyen, por ejemplo, problemas en el nacimiento, el uso de ciertas drogas alucinógenas o la presencia de infecciones víricas en la madre durante la gestación.
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