Manos a la obra
Si bien no existe una forma determinada de aplicación de la tintura, lo más práctico es dividir la cabeza en cuatro partes, trazando una raya al medio desde la frente hasta la nuca y otra de oreja a oreja pasando por la cúspide de la cabeza.
Por lo general, la aplicación es preferible empezando por la parte delantera y siempre sobre el cabello sin lavar, seco y perfectamente desenredado (especialmente si es largo).
El colorante debe esparcirse en forma homogénea sobre la zona que debamos cubrir sin extenderlo a otras no deseadas. En los laterales conviene hacer divisiones de mechas, lo más parejas posibles, para así poder realizar un teñido uniforme.
En cuanto a la parte de atrás, allí los mechones conviene tomarlos en forma oblicua para cubrir bien las raíces.
La tintura y las canas
Como se sabe, los cabellos canosos son pelos sin pigmento y por eso reacciona en forma distinta al resto cuando se le aplica tintura. Por eso la cana quedará un tono más claro al aplicado y esta diferencia se profundiza cuánto mayor sea la distancia de los tonos entre la cana y el color natural del cabello.
Además, también serán diferentes los reflejos que se obtengan entre las canas y el resto del pelo, dado que los colores aplicados sobre cabellos sin pigmentos no tendrán un fondo cálido con el cual combinarse. Para teñir sin problemas las canas, lo ideal es dividir la cabeza en dos zonas y aplicar en la que haya mayor cantidad de zonas blancas un tono de tintura más oscuro y cálido para oscurecer y pigmentar más la cana.
Si bien no existe una forma determinada de aplicación de la tintura, lo más práctico es dividir la cabeza en cuatro partes, trazando una raya al medio desde la frente hasta la nuca y otra de oreja a oreja pasando por la cúspide de la cabeza.
Por lo general, la aplicación es preferible empezando por la parte delantera y siempre sobre el cabello sin lavar, seco y perfectamente desenredado (especialmente si es largo).
El colorante debe esparcirse en forma homogénea sobre la zona que debamos cubrir sin extenderlo a otras no deseadas. En los laterales conviene hacer divisiones de mechas, lo más parejas posibles, para así poder realizar un teñido uniforme.
En cuanto a la parte de atrás, allí los mechones conviene tomarlos en forma oblicua para cubrir bien las raíces.
La tintura y las canas
Como se sabe, los cabellos canosos son pelos sin pigmento y por eso reacciona en forma distinta al resto cuando se le aplica tintura. Por eso la cana quedará un tono más claro al aplicado y esta diferencia se profundiza cuánto mayor sea la distancia de los tonos entre la cana y el color natural del cabello.
Además, también serán diferentes los reflejos que se obtengan entre las canas y el resto del pelo, dado que los colores aplicados sobre cabellos sin pigmentos no tendrán un fondo cálido con el cual combinarse. Para teñir sin problemas las canas, lo ideal es dividir la cabeza en dos zonas y aplicar en la que haya mayor cantidad de zonas blancas un tono de tintura más oscuro y cálido para oscurecer y pigmentar más la cana.