• Siempre conviene disponer de dos tonos de rubor: uno más luminoso y otro más opaco, y mezclarlos sobre el rostro. Con este método pueden iluminarse los rasgos que se quieran resaltar y oscurecer las áreas a disimular.
• En las caras alargadas no se debe aplicar rubor ni en la frente ni en el mentón, sino resaltar la parte baja de la sien y la nariz. De esta manera la atención de quien la mire se concentrará en el centro de la cara.
• En las caras anchas las aplicaciones se realizan en los pómulos, olvidándose de la nariz y las sienes.
• Cuando se quiere definir el contorno de la boca, hay que dibujar la V que se forma en el centro del labio superior con un delineado más claro y pintar el resto de la boca con un tono más oscuro.
• Cuando los labios son muy gruesos, para afinarlos, hay que delinearlos pasando el lápiz por debajo del borde natural.
• Si son muy finitos se debe dibujar encima de los bordes.
• Si sobre la superficie de los labios aparecen manchas o lunares, se deben cubrir primero con base y después aplicar el rouge.
• En las caras alargadas no se debe aplicar rubor ni en la frente ni en el mentón, sino resaltar la parte baja de la sien y la nariz. De esta manera la atención de quien la mire se concentrará en el centro de la cara.
• En las caras anchas las aplicaciones se realizan en los pómulos, olvidándose de la nariz y las sienes.
• Cuando se quiere definir el contorno de la boca, hay que dibujar la V que se forma en el centro del labio superior con un delineado más claro y pintar el resto de la boca con un tono más oscuro.
• Cuando los labios son muy gruesos, para afinarlos, hay que delinearlos pasando el lápiz por debajo del borde natural.
• Si son muy finitos se debe dibujar encima de los bordes.
• Si sobre la superficie de los labios aparecen manchas o lunares, se deben cubrir primero con base y después aplicar el rouge.