Ropa ajustada

Más allá de gustos y de modas, hay ciertas costumbres que nos resultan perjudiciales. La ropa demasiado ajustada tiene consecuencias negativas para el organismo.

Para que las piernas se mantengan bellas evite usar prendas que compriman la piel. Si bien los pantalones estrechos realzan la figura y quedan sexies cuando tenemos un buen físico, las consecuencias que traen son malas.

Tras algunas horas de compresión, la epidermis y los músculos se resienten y la circulación de la sangre se vuelve más lenta. Esta es una de las causas de la celulitis y también contribuye a que se empeoren las várices. Además de este inconveniente, la ropa ajustada, los cinturones, fajas o jeans ceñidos deforman la estructura grasa del cuerpo. Es entonces cuando notamos que no existe una dieta capaz de ayudarnos a que desaparezcan los rollitos de la panza.

Otro detalle clave son las bombachas. Con el paso del tiempo notamos que la zona de la cadera presenta una parte más hundida donde apoyan los laterales de la prenda. Este defecto es muy difícil de corregir.

Para evitar el problema asegúrese de que su ropa interior no le deja marcas de los elásticos y, si tiene que usar una bombacha más ajustada, colóquesela baja o bien muy alta, sobre la zona de los huesos.